Ya estamos a Domingo, nos levantamos hoy un poco menos temprano que ayer, no obstante no bajamos a desayunar más tarde de las nueve y media. La idea de hoy es hacer las maletas y de camino a nuestros hogares, hacer un barranco, el Viu de Llevata. Por lo que hemos oído un barranco con mucha agua y muy divertido. Se trata de un barranco de dificultad media con numerosos saltos y toboganes. Muy entretenido y divertido, como un parque acuático al natural. Muy apreciado por los barranquistas. Recorrido largo y muy acuático. Saltos de 8 metros, pero no es obligatorio, parte de nuestro equipo lo hizo mediante un pequeño rappel. También esta el famoso salto de "Tarzan" que deja perplejo a mas de uno, personalmente yo prefiero el de 8m.

A las once nos poníamos rumbo al barranco, un poco lejos, pero como nos "viene de camino" no pasa nada, al llegar ya casi llegamos cansados de curvas y coches, pero bueno un agradable paseo hasta la entrada del barranco con el equipo a cuestas y ya volvemos a estar en forma. Al llegar cual es nuestra sorpresa que todo y ser tan tarde apenas se ve movida el agua, parece que no hay gente, menuda suerte hemos tenido este fin de semana, dos barranco y ambos sin gente. Acabamos de ponernos el equipo y al agua, empieza nuestro barranco dominical, hay quien va a misa, nosotros vamos al Viu de Llevata.

Al principio nos divertía ver tanto caudal de agua, pero poco a poco esa diversión se fue convirtiendo en frío, no era excesivo pero se notaba, de ir con el neopreno abierto a cerrarlo y apretar los velcros del cuello.

La verdad es que a medida que avanzábamos el barranco cada vez era más divertido e interesante. Habíamos depositado muchas esperanzas en este barranco y la verdad es que merece la pena, si te gusta el agua, este es un buen barranco.

Unos buenos toboganes y un salto de 8m. muy chulo y divertido, aunque si no te apetece saltarlo no es obligatorio, se puede descender mediante un pequeño rappel.

Justo antes del salto hay una zona donde poder descansar y reponer fuerzas, nosotros aprovechamos para que nos hicieran una bonita foto de grupo con los neoprenos puestos, creo que es la única donde salimos todos. Ahí fue el único punto donde nos cruzamos con otr@s barranquistas.

El retorno a los coches de unos 45 minutos, al principio parece muy duro, pues hay que superar una fuerte pendiente, pero luego no es tanto como parece. Merece la pena este barranco, además 45 minutos son pocos minutos de paseo.

Gran parte del éxito de este barranco se lo debemos a nuestra guía Mery, desde aquí felicitarla y agradecerle el buén rato que nos hizo pasar.

Sábado sabadete, neopreno limpio y barranquete, como ha cambiado el cuento, antes no era así, pero bueno, los tiempos cambian.
Nos despertamos con ganas de comernos el mundo, bueno una con dolores en los brazos, vaya un poco de agujetas, la falta de deporte, eso es que el novio no la ha tratado bien últimamente. Desayunamos de forma copiosa, eso si a las nueve en punto presionando a los pobres del hotel a que nos sirvan el desayuno, no se para que tanta prisa, pero bueno, así fue.

Tras desayunar de forma copiosa nos preparamos para una mañana de rappel y agua, hoy disfrutaremos de un gran barranco el barranco de Estaron. Nos dirigimos hacia el punto de encuentro, lo hacemos en dos coches, la aproximación será más sencilla si lo hacemos de esta forma, nos hacemos viejos y tenemos que evitar largas caminatas cargados.

Llegar a la cima propuesta fue una experiencia maravillosa, hacer cima nos dejo sin palabras, un cúmulo de emociones difíciles de describir.